Cada día estoy más harto de la empresa y tengo menos ganas de que salga adelante. C se pilla rebotes un dia sí y otro también, JB salta a la de menos, JR está hasta las narices de su papel, y yo estoy cada vez más aburrido del tema.

Si mañana mismo tuviéramos que cerrar, no me importaría lo más mínimo. Incluso puede que me alegrara.

Comentarios

  1. Pues eso, que cada uno hace lo que quiere, y yo me encuentro más cómodo siendo un "mandado" que siendo jefe.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La nostalgia del papel

Sueños y olor a orégano