Llevo un par de días que no consigo hablar con R. Siempre le pillo el teléfono apagado, o cuando está encendido, está trabajando y no puede contestar. La echo de menos, pero no puedo dejar de pensar si lo apaga para no contestar o es simplemente un problema de cobertura. Ainnnn, el síndrome del adivino, que malas pasadas te juega...

Comentarios

  1. Hola Deckard. Siento que estés de nuevo en esa situación. Preferible será pensar que se le ha estropeado el teléfono, o incluso que lo ha perdido, o se lo han robado. Ya mostró que sí tenía interés en ti.

    Un beso enorme. Sigo intentando recuperarme del susto. J.me ayuda, te lo aseguro y te envía un fuerte abrazo. Parece que le has gustado mucho

    ResponderEliminar
  2. Tranquila, sólo fue un pensamiento pasajero. Creo que me estoy obsesionando demasiado con esta chica, y tendría que tranquilizarme un poquito.

    Saluda a J de mi parte. Buen chico éste.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La nostalgia del papel

Sueños y olor a orégano