Clases de marketing

Ayer recogí el coche del taller (¡¡por fin!!), después de 3 semanas. Lo llevé para que le revisaran el aire acondicionado, que no funcionaba, y ya me temía tener que pagar un compresor nuevo o algo por el estilo. Al final parece que era un problema eléctrico, y lo arreglaron sin demasiado coste. Ya de paso, les dije que le hicieran la revisión de los 90.000 km.

El caso es que después de 3 semanas, de "mañana te lo entrego", "es que estoy esperando una pieza que me traen mañana" y "no te enfades conmigo" (el del taller se parecía al gatito de Shrek 2 cuando me decía esto, y claro, no me podía enfadar con él), ayer me lo entregó. Y lo típico, que si tenía algún problema que lo volviera a traer, que si la garantía, bla, bla, bla...

Pues hoy lo he probado y el aire acondicionado sigue sin funcionar. Pero bueno, ¿para qué ha estado el coche en el taller 3 semanas?. Lo he vuelto a llevar esta mañana y el gatito me ha dicho: "vaya, que raro. Bueno, tráemelo de nuevo el lunes por la mañana y le digo a mi amigo que me ayudó a arreglarlo que le eche otro vistazo, a ver que le ha fallado al apaño que le hicimos"... :-O

A veeer. Un poco de seriedad. Si no lo arreglaste tú sino un amigo tuyo, no se lo digas a un cliente. Y no digas que le hiciste un apaño, di "que raro, a lo mejor se ha soltado un contacto al cambiarte la correa de la dirección, tráemelo el lunes y te lo arreglo" o algo por el estilo.

Creo que a este hombre le hacen falta unas buenas clases de marketing para venderse mejor. La verdad, no sé cómo tiene el taller siempre lleno. Espero que al menos lo del "apaño" simplemente sea una forma de hablar.